Los nazarenos reciben un severo correctivo del supermotivado Bidaideak Bilbao BSR por conseguir la segunda plaza
BSR Vistazul despidió la competición oficial en 2017 de forma triste, ya que recibió este sábado un severo correctivo en tierras vascas, en su enfrentamiento ante el Bidaideak Bilbao BSR, donde perdieron por un abultado 102 a 39.
Se juntaron varios factores que hicieron que el resultado fuera tan contundente a favor de los bilbaínos en la última jornada de la primera vuelta de División de Honor de Baloncesto en Silla de Ruedas.
Entre ellos estaba la posibilidad de los locales de ser cabezas de serie en la próxima Copa del Rey si ganaban de 63 puntos o más y perdía el Ilunion, así como que el conjunto sevillano viajó sólo con siete jugadores debido al alto coste que eso conllevaría para las arcas del club.
De esta forma, los vizcaínos salían en tromba y con una actitud defensiva presionante buscaban conseguir las diferencias desde el comienzo del choque, que se disputó en el Polideportivo de Txurdinaga de Bilbao.
El 24-6 que reflejaba el marcador al final del primer cuarto lo decía todo, pero lo peor estaba por llegar para los intereses andaluces. En un segundo acto para olvidar en el que ímpetu local subió muchos enteros las distancias se dispararon para irse al descanso con un 68-15.
La mermada plantilla nazarena vivió sus mejores minutos tras el descanso, De hecho, el parcial en este tiempo fue de un ajustado 12-10. Los vascos aumentaron su nivel de juego en los últimos instantes del encuentro para conseguir la ansiada diferencia de puntos y lo consiguieron cumpliendo su objetivo.
En cambio, los visitantes bastante hacían con aguantar el chaparrón de forma digna a pesar de luchar en desigualdad de condiciones. La Junta Directiva lamenta “la falta de una mayor implicación” de las Administraciones Públicas y entidades privadas con este proyecto deportivo de élite.
Los árbitros (Araceli Mulet como principal, además de José Antonio López y Jorge de la Piedad, en calidad de auxiliares) estuvieron bien al no ser un partido con excesivas complicaciones dado el resultado.
