En la Biblioteca de Montequinto, durante el mes de octubre de 2021 se puede visitar la EXPOSICIÓN DE FOTOGRAFÍA Y PINTURA que bajo el título «PAUSA [II]» presentan Raúl Díaz y Rafa López.
Detener el tiempo o capturarlo es la principal aplicación de la acción fotográfica, el famoso instante decisivo, la instantánea, la naturaleza muerta, la ráfaga, la larga exposición… todos términos asociados a la técnica fotográfica.
Más allá están las experiencias, la mirada, la pasión, el gusto, el estilo, la implicación, la condición, el discurso, la historia…
Y en este caso, sólo la mirada y el tiempo, el tiempo detenido ante nosotros, delante de nosotros, alguien que a la vez detiene el suyo, y la mirada, en este caso se intuye más de lo que se ve.
Ha detenido el tiempo para observar, para no dejar pasar el detalle de lo que mira, para principalmente disfrutarlo o sufrirlo, pero sobre todo para congelarlo en su recuerdo, o incluso para tomar una decisión.
Mirando hacia el personaje y dedicarle sólo unas milésimas de segundo, llamando la atención por detenerse ante lo que es la sociedad de hoy día, una sociedad a alta velocidad, sin PAUSA y a un ritmo que casi ha olvidado que podemos parar, detenernos a mirar, a reflexionar o a decidir, y todo ello en diferentes ciudades del mundo y de espacios en el tiempo.
Compuestas por Fotografía y Pintura, sobre soporte de Aluminio, en esta muestra se establece una comunicación de ida y vuelta entre ambos artistas, consiguiendo un diálogo constante en cada una de las obras.
Las imágenes de Raúl a través de la idea de “PAUSA” se han acercado al mundo urbano y paisajístico de Rafa, intentando plasmar en sus instantáneas grandes cromatismos saturados de color, cantidad de elementos y formas que conectan unos con otros.
Todo ello, con una imagen equilibrada y perfectamente compuesta, a la que el pintor contesta e interpreta de diferentes formas con el mismo soporte y tamaño.
A través de líneas, trazos y manchas, realiza abstracciones que si no fuera por la pieza inspirada, nadie sabría que partió de una realidad.
Con esta base los artistas, han construido un discurso entre sus formas expresivas que intenta transmitir esa PAUSA, ese instante, cruzando formatos, técnicas y sólo preocupándose de poder unir sus obras en una única pieza, que haga a su vez pararse un segundo al visitante, a la persona que se detenga ante sus obras.
